Una operación conjunta de los Mossos d’Esquadra y la Policía Nacional ha acabado este martes con la detención de un líder histórico de la banda de los Trinitarios. El ahora arrestado, Waltel Yasmani F., alias Pukita, fue condenado por “hacer la X” en la espalda a un joven que intentó dejar el grupo en el año 2012. Pukita es considerado subjefe de la organización criminal desarticulada, contra la que se están llevando a cabo diversos registros este martes, que se ha saldado con 15 detenidos por robos violentos y tráfico de drogas. El hombre se encontraba en prisión al inicio de la investigación, igual que cuatro objetivos más, según fuentes policiales
El caso arrancó hace más de un año con diversas tentativas de homicidio en la zona del Hospitalet de Llobregat, con diversos tiroteos y heridos graves. Los Mossos d’Esquadra y la Policía Nacional coincidieron en algunos de los sospechosos, y trabajaron de manera conjunta para arrestarles. El supuesto líder de la organización, Joel Alexander M., ha sido arrestado en Salou (Tarragona), según fuentes policiales. Los agentes actúan contra lo que consideran una organización criminal que cometía robos violentos y traficaba con drogas, y que disponía de armas de fuego.
La operación, bautizada por los Mossos como Sixhole y por la Policía Nacional como Rosari, sigue todavía abierta y se encuentra bajo secreto de las actuaciones. Más de 300 agentes se han desplegado a primera hora de la mañana de este martes en los municipios de Barcelona, l’Hospitalet de Llobregat, Esplugues de Llobregat, Sant Boi de Llobregat, Cubelles y Salou. Los policías se han incautado de armas de fuego, blancas, dinero en efectivo y material informático y de telefonía.
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Pukita fue uno de los cabecillas de los Trinitarios en Cataluña, donde la banda, de origen dominicano, se estableció en el año 2007. En la investigación contra las lesiones graves cometidas contra un joven que intentaba dejar el grupo, Pukita fue considerado uno de los líderes del grupo. Ya entonces el hombre acumulaba numerosos antecedentes policiales por delitos violentos. Los investigadores le describen como un delincuente consolidado, que siempre ha tenido un rol de liderazgo.
La operación contra esta banda latina se suma a otras operaciones que han llevado a cabo tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil en Cataluña, después de diversos años en los que estos grupos había desaparecido del radar policial. Los Mossos d’Esquadra mantienen una mirada escéptica sobre el resurgir de la actividad de las bandas, en cuanto a grupos enfrentados entre sí, con venganzas y peleas por el control del espacio y del tráfico de drogas. Aunque han actuado también contra ellos, consideran que su actividad es puramente criminal, desvinculada de la pertenencia a una banda concreta.
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